Encuestas Laborales
Cómo realizar una encuesta de clima laboral a los empleados de una empresa
Descubre en el siguiente artículo, cómo se realiza paso a paso una encuesta de clima laboral para los empleados de una empresa.
Encuestas Laborales
Descubre en el siguiente artículo, cómo se realiza paso a paso una encuesta de clima laboral para los empleados de una empresa.
¿Necesitas ayuda?
Juan Carlos Puerta
HR Consultant
27 de mayo, 2025
El 85% de los empleados en el mundo no están comprometidos con su trabajo, según un estudio de Gallup, y una buena encuesta clima laboral puede ayudarte a descubrir por qué.
Porque aunque todo parezca funcionar bien desde el escritorio de la dirección, lo que verdaderamente piensan y sienten las personas que hacen posible los resultados, a veces va por otro camino. Y si no preguntas, jamás lo sabrás.
Una encuesta clima laboral no es solo un formulario con preguntas bonitas para cumplir con una política. Es, en esencia, una conversación silenciosa entre la empresa y sus colaboradores. Un canal para escuchar, sin interrupciones, lo que de verdad se vive dentro de la organización.
Se trata de identificar los factores que influyen en el ambiente de trabajo: comunicación, liderazgo, reconocimiento, carga de trabajo, confianza, crecimiento, y muchos más.
Cuando haces bien una encuesta clima laboral, conviertes la percepción en información útil. Ya no tomas decisiones con corazonadas, sino con datos. Y esos datos, bien analizados, te permiten actuar antes de que el ambiente se vuelva tóxico o la rotación empiece a dispararse.
Porque Recursos Humanos está en el centro de las relaciones. Conoce la cultura, habla con todos los niveles, sabe dónde están los puntos de fricción y también dónde hay oportunidades. Liderar la encuesta clima laboral desde RRHH le da al proceso legitimidad, empatía y seguimiento.
Además, RRHH puede acompañar los resultados con planes de acción reales. Porque preguntar sin actuar es peor que no preguntar nada.
Ahora sí, manos a la obra. Hacer una buena encuesta clima laboral no es llenar una plantilla y enviarla por correo. Requiere pensar, estructurar, medir y comunicar de forma inteligente. Aquí te contamos cómo hacerlo.
Antes de escribir la primera pregunta, tienes que saber qué quieres descubrir. ¿Quieres medir el compromiso? ¿Evaluar el liderazgo? El objetivo debe estar enfocado.
Esto te ayudará a elegir los temas clave y a no saturar la encuesta. Porque nadie quiere responder un test eterno con 90 preguntas ambiguas. Sé directo, pero profundo.
Las encuestas de clima más efectivas no solo preguntan “cómo te sientes”, sino que exploran factores específicos como:
Cada dimensión debe tener al menos 2 o 3 preguntas bien pensadas. La idea es obtener una visión amplia para detectar lo que realmente afecta el clima.
Evita las preguntas cargadas o subjetivas como: ¿Te parece que tu jefe es un incompetente?”
Además, usa escalas tipo Likert (por ejemplo: de 1 a 5, donde 1 es “totalmente en desacuerdo” y 5 es “totalmente de acuerdo”). Esto facilita el análisis posterior y ayuda a comparar áreas, periodos y tendencias.
Y sí, incluye también un espacio abierto para comentarios. A veces, lo que no cabe en una pregunta estructurada dice más que todo lo demás.
Una buena encuesta clima laboral puede fallar por una mala ejecución.
Esto no es opcional. Si las personas sienten que sus respuestas pueden tener consecuencias negativas, dirán lo que quieres escuchar.
Debes asegurarte de que la plataforma sea segura, anónima y transparente. Y repetirlo varias veces en la comunicación. El mensaje debe ser claro: esto no es para juzgar, es para mejorar.
No lances la encuesta justo antes de vacaciones o en plena crisis organizacional. Busca un momento de estabilidad y comunícalo bien con anticipación. Usa todos los canales disponibles: correos, reuniones, pizarras, grupos internos.
La invitación debe motivar, no imponer. Frases como “Tu opinión cuenta” o “Ayúdanos a mejorar tu experiencia en la empresa” funcionan bien. Y muy importante: da seguimiento.
Una vez que tienes los datos, toca interpretarlos. No te obsesiones con los promedios. Busca patrones, áreas críticas, diferencias entre equipos, niveles de satisfacción, y brechas entre percepción y realidad.
Crea informes visuales y enfocados. No necesitas mostrar todo. Solo lo que sea útil para tomar acción. Y nunca olvides este paso: comunica los resultados. Comparte los hallazgos principales con los empleados.
Una encuesta clima laboral no cambia nada por sí sola. Lo que hace la diferencia es lo que haces después con lo que aprendiste. Y ahí es donde empieza el verdadero trabajo.
No todo se resuelve desde dirección general. Si detectas problemas de liderazgo en un equipo específico, involucra a ese líder. Si hay bajo reconocimiento en un área, trabaja con su responsable directo para cambiar eso.
Después de seis meses, vuelve a medir. No necesitas hacer la encuesta completa otra vez. Puedes aplicar una versión corta para revisar si los cambios están funcionando.
Y lo más importante: celebra los avances. Si el clima mejoró, dilo. Si hubo más participación, agradécelo. Cada paso cuenta y suma al vínculo entre empresa y colaboradores.
Hacer una encuesta clima laboral es mucho más que cumplir con un check de Recursos Humanos. Es demostrar que te importa lo que tu gente siente, piensa y necesita para dar lo mejor de sí. Es abrir un canal real de comunicación y usarlo para construir una cultura más sólida, más humana y más productiva.
Porque cuando escuchas con intención, también lideras con impacto.
Solicita una prueba gratuita de Sesame HR y descubre cómo puedes aplicar encuestas de clima laboral de forma simple, segura y 100% anónima. Porque la opinión de tu equipo merece ser escuchada y gestionada con inteligencia.
Orientada al cliente tanto interno como externo, especializada en la definición e implantación de las políticas de RRHH y en la gestión, selección y retención del talento.
Capacidad de liderazgo, comunicación, negociación, organización y coordinación de equipos. Experiencia de más de 12 años en Recursos Humanos.