Cómo el mentoring empresarial interviene en el desarrollo profesional

3 de agosto, 2022

El mentoring es una de las estrategias más utilizadas para capacitar a los nuevos empleados de una empresa. Es una técnica muy efectiva para lograr la máxima eficiencia y alcanzar un alto nivel de competitividad.

Por lo tanto, es un tema que deberías conocer. En este artículo te vamos a explicar bien de qué se trata y qué tipos de mentoring existen. Una guía rápida para gestionar tareas y equipos de forma exitosa.

¿Qué es el mentoring empresarial?

El mentoring empresarial es una herramienta, que permite adaptar a una persona a su nuevo ámbito laboral. Eso sí, de manera práctica.

Se diferencia del coaching por su enfoque. Veamos: el método mentoring empresarial trata de brindar apoyo en el ámbito profesional. En contraste, las técnicas de coaching tratan de fomentar el desarrollo personal del empleado.

Una persona que tenga más experiencia en el puesto hace de mentor y guía, de manera práctica, para su mentee. Así se denomina al empleado recién promovido o contratado para un puesto.

De esta manera, a través del mentor, el nuevo integrante de la empresa recibe toda la información necesaria. En consecuencia, ampliará sus habilidades profesionales y desarrollará sus funciones lo antes posible.

¿Para qué sirve el mentoring empresarial?

Las empresas incorporan las técnicas del mentoring empresarial como una herramienta de enseñanza práctica. Es un método ideal para que el trabajador adquiera los conocimientos necesarios desde un inicio. Así comenzará con sus funciones sin retardos.

En consecuencia, se elige como mentor a una persona que ya tenga experiencia en dichas funciones y con un buen rendimiento laboral. 

De esta manera, podrá advertir los problemas o retos y enseñar las soluciones al nuevo trabajador.

¿Cuáles son las funciones del mentoring empresarial?

Entre sus funciones principales se encuentran las siguientes:

• Transmisión del saber hacer de manera práctica.
• Desarrollo del potencial de los empleados, reconociendo las fortalezas y debilidades.
• Reducción de la curva de aprendizaje y adaptación a sus funciones.
• Acompañamiento a los empleados hacia la inserción de la cultura existente en la empresa.
• Identificación de obstáculos para la empresa, de acuerdo a la experiencia del mentor. 

Ventajas de implementar esta técnica de mentoría en las pymes

Las ventajas del mentoring empresarial son muchas para todos los implicados. Tanto para la empresa, como para el mentor y el mentee.

Para el mentee la implementación de estas técnicas significan un aumento de confianza y seguridad para ejecutar sus tareas. Esto aumentará su productividad desde sus inicios.

Además, al conocer de manera práctica los valores y visión global de la empresa podrá identificarse con ella.

Por otro lado, el mentor incorpora mayores habilidades profesionales, y desarrolla su habilidad de liderazgo. Además, al ser elegido como mentor es un reconocimiento profesional. Esto puede influir bien en su desempeño laboral, como motivación.

Para la empresa, implementar las técnicas de mentoring significa un aumento directo de la eficiencia y la productividad. Porque este programa trabaja sobre la motivación y satisfacción de los empleados.

Además, se promueve un clima laboral óptimo y es una excelente estrategia para retener los mejores talentos. En definitiva, aporta mucho a la gestión de recursos humanos.

Tipos de mentoring empresarial

Existen diferentes tipos de mentoring empresarial, de acuerdo a los objetivos o métodos utilizados. Vamos a revisarlos.

1. Formal e informal

El mentoring formal está programado por la empresa, posee un seguimiento y evaluación. Mientras que el mentoring informal se crea entre empleados, sin seguir ninguna norma ni evaluaciones.

2. Peer to peer (entre pares)

En este tipo de mentoring, el mentor y el mentee están relacionados. Ya sea por edad, profesión o alguna característica que les permita compartir experiencias, gustos o emociones similares. En este caso, no existe una jerarquización entre mentor y mentee. 

3. Mentoría exprés

Tal como su nombre lo indica se trata de estrategias que se pueden utilizar de manera informal. Puede ser a través de eventos, congresos o conferencias. Se ejecuta de manera rápida y no se realiza seguimiento de sus avances.

4. Reverse mentoring (a la inversa)

En este tipo de mentoring existe una retribución por parte del mentee a su mentor, desde su perspectiva generacional.

Este tipo de mentoría se implementa en los casos en que el mentor y el mentee tengan roles diferentes en la organización de la empresa. El resultado es un proceso de aprendizaje mucho más nutrido.

5. Mentoría grupal

Si son varias las personas que participan en un equipo de trabajo y son guiadas por un mentor, la estrategia se denomina mentoría grupal. No existen relaciones interpersonales, solo se tiene en cuenta el interés general del grupo.

Una de las alternativas de este tipo de mentoring es la consultoría externa. Esta se realiza mediante reuniones presenciales o virtuales, con seguimiento del avance de los proyectos y retroalimentación de dudas.

6. Cross mentoring

Este tipo de mentoring es más utilizado en el ámbito educativo. Sin embargo, tiene muchos beneficios para empresas cuyos sectores son dependientes.

De esta manera, algunas personas de un sector pasan a otro, para conocer las prácticas y procesos que influyen en sus funciones. También sucede cross mentoring entre países, o entre regiones dentro de un mismo país.

¿Cómo aplicar un programa de mentoring en tu negocio?

La implementación de un programa de mentoring en la empresa necesita de un diseño particular, el cual puedes crear siguiendo los siguientes pasos.

1. Determinación de objetivos. Incorporación de nuevos empleados, desarrollo de líderes o retención de personal.

2. Creación de plan. Incluir indicadores que se puedan medir, e indicar duración del proceso completo y de cada sesión.

3. Selección de mentores. Las personas con experiencia y mejor rendimiento laboral serán ideales para mentor, si poseen la habilidad de enseñar y liderar.

4. Supervisión de todo el proceso. Aunque el proceso de mentoring es confidencial, se puede analizar la evolución de los indicadores propios del plan. Por ejemplo, el avance y grado de satisfacción del mentee.

Entonces, ¿vas a incorporar una estrategia de mentoring en tu empresa? En tus manos queda decidir cuál sería la más adecuada para tu negocio.

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